El siguiente recurso es una narración sencilla y atractiva, adaptada al nivel de los alumnos, que introduce a los niños en el ambiente otoñal. A través de una historia llena de personajes amigables y descripciones visuales, los pequeños lectores podrán explorar los cambios que trae consigo el otoño, como la caída de las hojas, la llegada de los días más fríos, la migración de los animales y las festividades típicas de la estación.

El cuento está acompañado de actividades de lectura comprensiva que ayudarán a los alumnos a profundizar en la historia, haciéndoles preguntas sobre los personajes, el entorno, los sentimientos que experimentan y los eventos que ocurren a lo largo del relato.

Este recurso es muy versátil y puede utilizarse de varias maneras. Puedes leer el cuento en voz alta a tus alumnos durante una sesión de lectura grupal, promoviendo la interacción a través de preguntas y respuestas sobre lo que han escuchado. También puedes darles la oportunidad de leerlo individualmente o en parejas, siguiendo después con actividades escritas para comprobar su comprensión.

Las preguntas y actividades de la lectura comprensiva están diseñadas para ayudar a los estudiantes a mejorar habilidades como la identificación de ideas principales, la inferencia, la deducción de significado y la secuenciación de eventos. Asimismo, pueden cuenta con un ejercicio en el que los alumnos deberán dibujar parte del cuento leído, lo que permite un enfoque más visual y lúdico.

Este material ofrece numerosos beneficios en el aula, como la mejora de la comprensión lectora, ya que fomenta el análisis y entendimiento de textos de manera lúdica. Además, despierta el interés por la lectura al conectar la historia con la experiencia de los alumnos, mientras amplía su vocabulario a través de términos otoñales contextualizados. Este recurso también promueve el desarrollo emocional y social, permitiendo reflexionar sobre sentimientos y cambios, y combina elementos artísticos al invitar a los niños a ilustrar lo que han leído. Por último, su flexibilidad permite reutilizar las actividades de comprensión, facilitando un aprendizaje continuo y adaptativo.