En Actividades de Infantil y Primaria, entendemos la importancia de cultivar una conexión emocional con el medio ambiente desde una edad temprana. Por eso, en honor al Día de la Tierra, queremos presentar una actividad especial que involucra identificar emociones positivas y negativas en relación con nuestro entorno natural.

Nuestro medio ambiente no solo nos proporciona recursos vitales como aire limpio, agua y alimentos, sino que también es un lugar de belleza, serenidad y asombro. Sin embargo, en la sociedad actual, es fácil perder de vista este vínculo emocional con la naturaleza debido a las demandas de la vida cotidiana y la creciente urbanización. Es crucial que los niños desarrollen una comprensión profunda y una apreciación por el mundo natural que los rodea, no solo por su bienestar físico, sino también por su salud emocional y bienestar general.

En esta actividad, invitamos a los estudiantes a reflexionar sobre sus emociones en relación con el medio ambiente. Proporcionamos una lista de emociones, tanto positivas como negativas, y les pedimos que reflexionen sobre cómo se sienten cuando interactúan con la naturaleza. ¿Se sienten felices y en paz cuando están al aire libre, o se sienten preocupados por la contaminación y la destrucción del medio ambiente? ¿Qué emociones experimentan al ver imágenes de bosques frondosos, océanos prístinos o animales en peligro de extinción?

En el Día de la Tierra y todos los días, es importante fomentar una conexión emocional con el medio ambiente en los niños. Esta actividad especial ofrece una oportunidad para que los estudiantes reflexionen sobre sus emociones en relación con la naturaleza y desarrollen un mayor aprecio por el mundo natural que los rodea.