El final del curso escolar es un momento muy especial para docentes y alumnos. Es tiempo de celebrar lo vivido, de reconocer el esfuerzo realizado y de despedirse con cariño hasta el próximo año. Por eso, hoy te compartimos una idea sencilla, útil y muy bonita: unos portalápices para regalar a tus alumnos como detalle de fin de curso.
Estos portalápices han sido diseñados con mucho mimo y pensados especialmente para los más pequeños. Vienen decorados con ilustraciones alegres y mensajes positivos, ideales para motivar y recordar lo mucho que han crecido durante el año escolar. Puedes personalizarlos con el nombre del alumno o incluir una pequeña nota de agradecimiento o ánimo para el verano.
Son perfectos para entregar durante la fiesta de graduación, la entrega de diplomas o como sorpresa final en el aula. Además de ser un detalle práctico que podrán usar en casa o durante las vacaciones, se convierten en un recuerdo precioso de su paso por el aula y del vínculo especial con su profe.
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