La ortografía es una habilidad fundamental en el proceso de aprendizaje de la escritura. Un método efectivo para reforzarla es a través del dictado diario, una práctica sencilla que ayuda a los estudiantes a fijar las normas ortográficas de manera progresiva y natural. Implementar esta actividad como una rutina en el aula puede marcar una gran diferencia en la escritura de los niños.
El dictado no solo fortalece la correcta escritura de palabras y frases, sino que también mejora la atención, la memoria visual y auditiva, y la comprensión lectora. Dedicar unos minutos al dictado cada día de la semana permite que los estudiantes desarrollen confianza en su escritura y reduzcan errores comunes de manera significativa.
Para que la práctica sea efectiva, es importante ofrecer dictados adecuados a la edad y el nivel de cada estudiante. A continuación, os comparto tres fichas de dictado, cada una adaptada a un ciclo de primaria, con oraciones progresivamente más complejas.
Wow que interesante.
Muchas gracias y felicidades
Soy Judid de República Dominicana
Muy interesantes me encanto estos materiales