La escritura creativa es una herramienta poderosa para estimular la imaginación y mejorar la expresión escrita de los alumnos. Una forma divertida y efectiva de trabajarla en el aula es a través de imágenes absurdas, una propuesta que desafía a los estudiantes a crear relatos originales a partir de ilustraciones inesperadas y fuera de lo común.
La dinámica es sencilla: se entregan fichas con imágenes absurdas y los alumnos deben observar la imagen y, a partir de ella, inventar una historia que tenga sentido dentro de ese universo imaginario.
El uso de imágenes absurdas como detonantes de historias es un recurso altamente beneficioso en el aula. No solo estimula la creatividad de los estudiantes al enfrentarlos a situaciones inesperadas, sino que también fortalece su capacidad de razonamiento y resolución de problemas al buscar darle sentido a lo ilógico. Además, fomenta el desarrollo del lenguaje, ya que los alumnos deben seleccionar cuidadosamente las palabras y estructuras adecuadas para narrar sus relatos.
Deja una respuesta