El mood tracker, o calendario de mis emociones, introduce a los niños en el camino del autoconocimiento emocional desde una edad temprana. A través de esta herramienta, los estudiantes aprenden a identificar y comprender sus emociones, construyendo una base sólida para el desarrollo de la inteligencia emocional.

Este material promueve la comunicación emocional abierta en el aula. Los estudiantes pueden expresar sus sentimientos a través de la actualización diaria de su calendario, lo que facilita el diálogo y la comprensión entre compañeros y educadores.

Los profesores pueden utilizar este calendario como una herramienta para fortalecer las relaciones con sus estudiantes. El conocimiento profundo de las emociones de los estudiantes permite a los profesores adaptar su enfoque pedagógico y ofrecer el apoyo necesario para el desarrollo emocional y académico de cada estudiante.

El seguimiento constante de las emociones fomenta la construcción de resiliencia emocional. Los estudiantes aprenden a enfrentar desafíos de manera positiva, comprendiendo que las emociones son parte integral de la experiencia humana y que son capaces de superar adversidades.